Guillermo López Parra Bravo
Consultor en Desarrollo Organizacional y Capital Humano
Lograr que una organización funcione de manera correcta no es una tarea sencilla. Se requiere que múltiples factores en su interior estén alineados en la persecución de los objetivos: recursos materiales, sistemas de gestión, flujos de capital, procesos administrativos y el factor humano, entre otros (lo anterior sin considerar, evidentemente, los elementos externos, como la situación del mercado, entorno macroeconómico, situación gubernamental o coyunturas globales, por sólo nombrar algunos).
De estos mencionados anteriormente, el factor humano representa una importante oportunidad de mejora en las empresas mexicanas, ya que, es del dominio común, que los dirigentes organizacionales latinoamericanos enfrentan grandes retos para lograr la rentabilidad, como la alta burocracia gubernamental, cultura de una fuerte competencia basada en los precios y una gran demanda de estándares exigidos por empresas multinacionales al momento de elegir proveedores, situación que lleva a la mayoría de los negocios a privilegiar la adquisición de infraestructura, tecnología y materias primas, en su carrera por alcanzar el éxito.
Sin embargo, muchas empresas pertenecientes a diferentes niveles todavía ignoran que la inversión en el desarrollo humano es una de las más rentables si se practica de forma adecuada, permitiendo reducir considerablemente los gastos de operación e incrementar el volumen de eficiencia.
Esto es debido a que los colaboradores de empresas que capacitan a su personal en temas relacionados con el Factor Humano conocen mucho mejor el propósito de la organización, entienden hacia dónde se dirige y pueden contribuir de forma específica al cumplimiento de su misión, evitando desviarse de sus objetivos; tienen un autoconcepto mucho más realista que les permite mejorar el desempeño de sus actividades al identificar el impacto de sus deficiencias en la operación; y sobre todo, tienen líderes que se preocupan por desarrollar a su gente, retroalimentándola correctamente, impulsándola e inspirándola en la dirección correcta, en vez de crear climas organizacionales tóxicos que inexorablemente derivan en una alta rotación y ausentismo que puede llegar a costar millones cada año.
De igual forma, las empresas con un intenso trabajo realizado en el desarrollo humano y organizacional saben que un colaborador satisfecho será una fuente de recomendaciones para el consumo de su producto o servicio, así como una fuente de mano de obra al compartir en su entorno las bondades de su empleo y ambiente de trabajo. Muchas empresas ofertan sus vacantes prometiendo un excelente ambiente de trabajo, cuestión que rara vez es una realidad, decepcionando al personal de nuevo ingreso y rompiendo muchas expectativas creadas.
Son estas sólo algunas de las razones por las que todas las organizaciones deberían fortalecer entre sus equipos de trabajo las competencias de factor humano, también llamadas Soft Skills, (o habilidades blandas), y listamos a continuación algunas que las empresas top en Latinoamérica tradicionalmente buscan desarrollar:
- Comunicación.
- Formación de instructores y entrenadores internos.
- Trabajo en equipo.
- Liderazgo.
- Inteligencia emocional.
- Habilidades de supervisión.
- Manejo de conflictos.
- Coaching.
- Calidad en el servicio.
- Ventas.
- Negociación.
- Administración del tiempo.
- Orientación a resultados.
MDC es una organización que, desde hace más de 40 años, trabaja con empresas de múltiples giros y tamaños. Desde una planta productiva a nivel local hasta empresas internacionales con presencia en diferentes continentes.
Lo invitamos a contactarnos y a tener una conversación sin costo con alguno de nuestros especialistas para que le ayuden a detectar las competencias y habilidades que debería desarrollar en su equipo para generar el mayor impacto en el menor tiempo posible.